PAULA M. GONZÁLVEZ

Los misiles alcanzan los centros hospitalarios de Siria

Imágen de Médicos Sin Fronteras - Bombardeo en Siria
Imágen de Médicos Sin Fronteras - Bombardeo en Siria

Según Médicos Sin Fronteras, la destrucción del hospital parece producto de un ataque deliberado

Los misiles alcanzan los centros hospitalarios de Siria

En la provincia de Idlib, al norte de Siria, un hospital apoyado por Médicos Sin Fronteras ha sido completamente destruido, causando la desaparición de al menos ocho personas  y la muerte de siete.

Se trata del hospital de Ma’arat Al Numan, alcanzado este lunes por cuatro misiles repartidos en dos ataques, con tan solo minutos de diferencia entre uno y otro, que han causado daños en 15 casas y otras estructuras de la zona, entre las que se encuentra otro centro hospitalario sin apoyo de Médicos Sin Fronteras. Además, otros dos hospitales de la ciudad de Azaz también han sido atacados.

“La destrucción del hospital Ma'arat Al Numan deja a una población de unas 40.000 personas sin acceso a atención médica en una zona de conflicto abierto”, apunta Massimiliano Rebaudengo, coordinador general de Médicos Sin Fronteras en Siria.

El hospital en cuestión facilitaba atención médica a 1.500 personas al mes, con 1.100 consultas a través de urgencias y 140 operaciones quirúrgicas en el mismo período de tiempo. Además, este mismo hospital se había visto obligado anteriormente a abandonar sus antiguas instalaciones por haber sido atacado hasta tres veces, por lo que en diciembre de 2015 la organización médica ayudó a su reconstrucción.

En Azaz, a 100 kilómetros de Ma’arat Al Numan, se han intensificado los combates, provocando heridas de guerras en muchos de los pacientes atendidos en centros hospitalarios de la ciudad.

A causa del ataque, cinco pacientes del Ma'arat Al Numan, un guarda del hospital y un acompañante han perdido la vida, y ocho miembros del personal del centro se encuentran desaparecidos, a lo que hay que sumar un número desconocido de pacientes, según informa la organización. El centro contaba con 30 camas, dos quirófanos, una clínica ambulatoria, servicio de urgencias, y una plantilla de 54 personas.

"La destrucción de la instalación médica a la que Médicos Sin Fronteras facilitaba apoyo parece producto de un ataque deliberado contra la misma", añade Rebaudengo.